Con
Cristo, en el Domingo de Ramos, iniciamos una impresionante peregrinación hacia
el culmen de su misión. El Señor quiere celebrar la Pascua ¿por qué no vivirla,
especialmente este año, como si fuera la primera vez?, ¿Por qué no vivir
intensamente cada gesto y cada oración, cada palabra y cada silencio que nos
conduce hacia el rostro auténtico de Dios? Hoy, la alegría, hace que se sacudan
palmas al viento. En la tarde de Viernes Santo, las voces enmudecerán por
cobardía. Que nuestras gargantas entonen cánticos de alegría y alabanza:
¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!
¡Feliz
Semana Santa, hermanos!, ¡Felices horas de pasión, muerte y resurrección!, ¡Las
necesitamos más que nunca!
La Oración incluye:
Jornada Mundial de la Juventud 2014.-
"«Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de
ellos es el reino de los cielos»"
Bienaventurados quiere decir felices. Decidme: ¿Buscáis de verdad la
felicidad? En una época en que tantas apariencias de felicidad nos atraen,
corremos el riesgo de contentarnos con poco, de tener una idea de la vida “en
pequeño”. ¡Aspirad, en cambio, a cosas grandes! ¡Ensanchad vuestros corazones!
Puedes descargarla en el siguiente enlace:
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